La actual coyuntura económica mundial, que se debate entre la incertidumbre derivada de la caída de los precios del petróleo y otras materias primas, el estancamiento de la economía de Europa y las dudas sobre el futuro de los mercados en Estados Unidos, tendrá un impacto en los empleos de los próximos meses.

Durante la última década, el país logró mantener una tendencia decreciente en su tasa desempleo (exceptuando el período de la crisis financiera de 2008-2009).

En 2013, este esfuerzo se plasmó cuando la proporción de trabajadores desempleados alcanzó un solo dígito. A estos anteriores factores hay que sumar el cambio estructural del empleo que ocurrirá en los próximos meses.

Por tal motivo, Portafolio.co consultó a tres analistas para señalar los rasgos que moldearán la dinámica del empleo en el país.

Según el informe mensual del mercado laboral elaborado por Fedesarrollo, la participación de trabajos industriales y agrícolas ha retrocedido, mientras que el sector servicios reporta un avance importante.

Sin embargo, el pronóstico para 2015 resulta desalentador.

Fedesarrollo sugiere que la economía colombiana decrecerá en 2015 –por la reducción de los precios del barril de crudo– causando una desaceleración en la cantidad y calidad de empleos demandados por las empresas colombianas.

Así mismo, este hecho causará un impacto a nivel sectorial.

La caída del sector petrolero incidirá en los salarios y en la informalidad de los trabajadores.

Sumado a esto, la economía colombiana afronta un fenómeno de devaluación que está restándole dinámica al comercio.

Esto tendrá un impacto obviamente negativo sobre el mercado laboral colombiano. En este sentido, Fedesarrollo resalta que este sector fue el que más creó puestos de trabajo en los últimos años, aunque es posible que el deterioro del empleo en el sector comercial pueda ser aliviado parcialmente por los sectores agrícola e industrial.

Una tasa de cambio con un nivel sostenido de apreciación facilita que los sectores exportadores de bienes agrícolas y manufacturas aprovechen su condición de ser intensivos en mano de obra para generar nuevos empleos.

Adicionalmente, Fedesarrollo pronostica que la construcción liderará el crecimiento económico en el mediano plazo.

Los proyectos de infraestructura de cuarta generación (4G) harán de locomotora de la contratación en Colombia.

Por otra parte, Camilo Durán, analista de Credicorp Capital, señaló que se espera que el mercado laboral continúe mostrando una buena dinámica en marzo.

“Como lo mencionó el BanRep en su reciente comunicado de política monetaria, el buen momento del mercado laboral puede amortiguar en cierta medida la esperada desaceleración en el consumo durante este año”, agregó Durán.

Adicionalmente, desde Credicorp Capital creen que el ritmo de creación de empleos durante febrero fue bastante alto, en la medida que la tasa de desempleo se redujo a pesar de un importante incremento en la tasa de participación. “Por lo que esta tendencia se podría continuar observando en el dato de marzo”, sugirió Durán.

Por otra parte, Camilo Silva, analista y socio de Valora Inversiones, espera que el desempleo en marzo se ubique en 9,8 %.

Un poco más optimista, Ángela González, analista de Investigaciones Económicas del Banco de Bogotá, afirmó que el desempleo se sitúe en 9,43 %.

Silva cree en que el Gobierno debe implementar medidas que brinden a los sectores productivos incentivos de corto plazo, que sean de rápido reflejo en sus estados financieros de los cuales se traduzcan en mayores empleados en sus empresas

González concuerda con Silva y asegura que el sector de la construcción será el ‘jalonador’ del empleo en el país.

Al igual que Fedesarrollo, la economista del Banco de Bogotá, asevera que la construcción de vías 4G tendrá la responsabilidad de liderar la creación de nuevos empleos.

‘EL AJUSTE FISCAL ES NECESARIO’

Camilo Durán considera que se necesitará hacer un ajuste fiscal consistente con la nueva realidad de menores ingresos provenientes del sector petrolero.

“Ante un menor ritmo de gasto, se espera que la economía se desacelere en 2015 y 2016, efecto que se podría evidenciar en el mercado laboral, en la medida que la creación de empleo podría reducirse y algunos empleos podrían recortarse”, complementó el analista.

Silva va un poco más allá y precisa que el impacto del déficit fiscal se verá reflejado en los datos de del mercado laboral para el segundo semestre de 2015.

Por el contrario, González cree que el déficit fiscal no se sentirá porque la Ley de Primer Empleo amortiguará la desaceleración en el sector de comercio.

En adición, la analista del Banco de Bogotá señaló que si bien la caída en la cotización del barril de petróleo fue un choque que ‘descuadró’ la caja del Gobierno, el desempleo del sector petróleo no afecta las cuentas de los demás sectores, pues “el despido de trabajadores de empresas petroleras no afecta el agregado porque este sector es más intensivo en capital que en trabajo.

En línea con lo anterior, Durán, siguiendo al Banco de la República, cree que el efecto del déficit fiscal no es inmediato y su materialización de podría demorar.

Pero no descarta que una restricción presupuestal afecte las cuentas del mercado laboral: “desde el 2012 el sector de ‘Servicios sociales, comunales y personales’ ha sido el de mayor ritmo de creación de empleo, por lo que una restricción presupuestal podría afectar esta dinámica en el futuro”.

Finalmente, los cálculos de Valora Inversiones indican que la ciudad con mayor tasa de desempleo en marzo sería Cúcuta porque la frontera colombo-venezolana presenta los mayores retos para crear empleos debido al deterioro de la economía venezolana.

Barranquilla presentará la tasa más baja de desempleo por ser un gran polo de desarrollo portuario y el avance de su infraestructura.

En resumidas cuentas, el Gobierno tiene una tarea pendiente con la producción de empleos. Pero nunca es tarde. El país debe sacar provecho del cambio tecnológico y generar puestos de trabajo caracterizados por dos componentes: tecnología e innovación.

Los cierto es que si el país le ‘mete la ficha’ a la generación de empleos en  los sectores agroindustrial y servicios, el país dejará de depender de la contratación pública.

tomado de:https://www.portafolio.co/economia/empleo-marzo