Ventajas: las respuestas a beneficios que no son simplemente financieros funcionan de manera excelente, como los ‘días casuales’ en la oficina, fiestas de la empresa y actividades sociales fuera de la oficina.

Servicios: los ambientes laborales con espacios orientados a la distensión generan una motivación especial entre los miembros de un equipo. Grandes empresas como Google cuentan en sus principales oficinas con espacios donde sus colaboradores pueden relajarse unos minutos dando lugar a la innovación y creatividad.

Un gimnasio, cafetería o guardería son buenos incentivos para que los empleados puedan mantenerse enfocados en sus proyectos.

Educación: la gente responde a los incentivos educativos y una serie de compañías ofrecen incentivos destinados a brindar educación adicional de calidad. Con ello, la fuerza de trabajo puede llegar a ser más hábil, además se generará lealtad propiciando la retención de talento.

Reconocimiento positivo: reconocer a alguien en público por un trabajo bien hecho puede hacer una gran diferencia. Es importante proporcionar un refuerzo (o retroalimentación) positivo. Los programas que reconocen a los empleados generan una verdadera motivación en ellos.

Bonos: aunque es fundamental el desarrollo de una línea de carrera, con ayuda de incentivos educativos, los empleados suelen responder a las bonificaciones como una forma de recompensar sus grandes actuaciones.

Recomendaciones para los líderes

Para ayudar a identificar aquellos que no están preparados para ejercer funciones de liderazgo, es indispensable evaluar estos dos siguientes patrones de conducta a fin de corregirlos:

Confiar demasiado en la experiencia pasada: aunque muchos líderes consideran útil confiar en la experiencia profesional obtenida a raíz de su permanencia en anteriores organizaciones, en realidad, adoptar dicho enfoque puede resultar peligroso en un nuevo empleo.

Adicción a política corporativa: esta conducta hace difícil tomar decisiones objetivas y gestionar libremente las responsabilidades. Aquellos líderes que son absorbidos por las políticas de la empresa pierden su identidad, dejándose atrapar por las agendas y motivaciones de otras personas.

Tomado de: larepublica.co